Segunda Parte, Capítulo II

El capítulo segundo de la segunda parte comienza con la llegada de Winston a un campo en donde la muchacha le dijo que se juntaran. Caminando por ahí Winston se encontró con un bosque y muchas flores, las cuales luego de examinarlas empezó a tomarlas, hasta tener un gran ramo. De un momento a otro escucha unas pisadas que vienen a sus espaldas, él las ignora con miedo, y continua recogiendo flores. Se le acercan las pisadas solo para revelar que la causante de ellas era la misma muchacha. Pero todavía no podían hablar, y es por eso que tuvieron que adentrarse en el bosque hasta conseguir un lugar seguro (sin telepantallas ni micrófonos). Estuvieron caminando sin detenerse hasta llegar a un árbol derribado, aquí decía la chica que uno podía estar seguro. En un inicio Winston se sienta a una distancia de la muchacha, pero poco a poco comienza a acercársele. Conversaron durante un tiempo, pero su conversa se ve interrumpida por el actuar de la muchacha, que salta hacia Winston, abrazándolo y besándolo hasta que caen por consecuencia al piso. Winston parecía estar disfrutando la situación, eso sí, él no sentía ninguna atracción física hacia la chica por el momento, puesto a que señalaba que era muy pronto para cualquier acercamiento con ella. Luego de aquello, recuperan la compostura, y es ahí donde Winston le pregunta su nombre. Ella se llamaba Julia y tenía por lo menos la mitad de la edad de Winston. Estuvieron hablando un rato más; Julia le preguntaba a Winston como la veía, y él le respondió que pensaba que era una espía; a raíz del comentario ella se echó a reír, aunque parezca que esté del lado del gran hermano, ella, al igual que Winston, lo odia, no puede soportar nada con relación a él. Mientras charlaban Julia había traído un chocolate (los cuales eran escasos) y lo compartió con Winston. Luego, caminan un poco hasta llegar a un lugar con praderas preciosas, las cuales captan directamente la atención de Winston, debido a que es el mismo “País Dorado” que había visto en sus sueños. Ambos divisaron un pájaro que cantaba en las cercanías, y mientras esto sucedía, se abrazaron nuevamente. Posteriormente, regresan al árbol derribado y de improvisto, Julia comienza a desvestirse, mostrando así su figura ante Winston. Él primeramente dirigió su mirada hacia su rostro, denotando así sus facciones. Pero prontamente ambos caen de rodillas uno frente al otro, acercándose más y más… Terminado su (autodenominado) acto político, se pusieron a dormir en las cercanías. Transcurrido ya media hora, Winston se despierta y contempla a Julia, preguntándose a sí mismo que todavía ni le había preguntado por su apellido y donde vivía. Mi comentario: aunque se viva en una situación apocalíptica, Winston logra encontrar un verdadero amor, pero eso sí, ha de tener cuidado, debido a que lo que está haciendo no es correctamente visto por “el gran Hermano” y le puede poner en aprietos. Ahora solo queda preguntarnos; ¿Cuánto durará el nuevo amor de Winston?, ¿Lograrán vivir felices?

Comentarios

  1. Evaluación Equipo Lector, N. López:

    1) extensión y fecha: 3/3
    2) objetividad y completitud: 3/3
    3) uso de la lengua: 3/3
    4) gramática y ortografía: 3/3
    5) coevaluación: 3/3 puntos.

    Puntaje total: 15/15
    Calificación: 7,0

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Tercera parte, Capítulo II

Segunda parte, capítulo VI - VII

Capítulo IX segunda parte (desde la p.161)